Entretelones Samuel Valenzuela Andaban de compras estirando el gasto o cumplían con sus jornadas laborales en un comercio atestado de mercancí
Entretelones
Samuel Valenzuela

Samuel Valenzuela
Andaban de compras estirando el gasto o cumplían con sus jornadas laborales en un comercio atestado de mercancía y de personas, 23 ya no volverán a sus hogares, dos más tampoco lo harán en el corto plazo por la gravedad de sus lesiones y ocho más tendrán convalecencia incierta por quemaduras e inhalación de gases tóxicos.
Ese es el saldo de una explosión y posterior incendio en la tienda de baratijas Waldo’s en el céntrico sector comercial de Hermosillo en cuyo interior fallecieron 12 mujeres, 5 hombres, dos niñas, 4 niños, y 12 lesionados, dos de ellos de gravedad y un par que no requirieron de atención médica especializada.

Nueva desgracia en Hermosillo.
La causa del siniestro que vuelve a enlutar a la capital de Sonora aún está bajo investigación, sea por el departamento de bomberos o por la Fiscalía General de Justicia del Estado, pero de entrada se habla de altas y bajas en el suministro de energía eléctrica en ese sector; un corte de luz y al volver el servicio ocurrió fuerte explosión en un transformador dentro de la tienda para luego propagarse un fuerte incendio con el trágico saldo ya mencionado.
De acuerdo con testimonios de quienes han acudido a esa tienda, el siniestro fue una trampa mortal por lo atestado de sus angostos pasillos, el desordenado tenderete de sus espacios de exhibición y principalmente por carecer de salidas de emergencia, sin que tengamos idea de cómo es que tenían un transformador adentro de dicho comercio, cuando no hace ni tanto una explosión similar a pie de calle dejó malheridos a joven pareja de estudiantes.
No hay palabras para describir el sentimiento de impotencia frente al saldo de incidentes de esa naturaleza, de aparentes accidentes que pudieron evitarse, tal como fue el caso de la también dolorosa tragedia en la Guardería ABC en junio de 2009 que causó la muerte de 43 niñas y niños y secuelas a muchos más o el de julio de 2023 en el Beer House en San Luis Río Colorado en donde murieron 11 parroquianos y músicos.

Condolencias.
Sobre el siniestro en Waldo’s hay mucha tela de donde cortar cuando aún no se cuentan con resultados de peritajes de especialistas, no faltando las teorías conspiranoicas o elucubraciones cargadas de sospechosismo toda vez que esa cadena ha tenido seis incendios desde 2022 en sucursales de diversas entidades de la república, y por lo que se sabe, solo en la de Hermosillo hubo fatalidades.
De confirmarse lo de la explosión del transformador, bien debería involucrarse en los peritajes a especialistas de la Comisión Federal de Electricidad, ya que antes del siniestro se reportan altas y bajas y corte de suministro en el área, e incluso, por rumbos de nuestro vecindario hubo inopinado y prolongado apagón una hora antes de los trágicos sucesos en el centro comercial de Hermosillo.
De destacar la rápida reacción y aplicación de protocolos para atender la emergencia de parte del departamento de bomberos y la buena coordinación entre la policía municipal y estatal, así como la respuesta tanto del gobernador Alfonso Durazo Montaño y el alcalde Antonio Astiazarán, quienes cancelaron las actividades públicas relacionadas con la celebración del Día de Muertos.
Ahora viene el deslinde de responsabilidades; que si qué instancia, la municipal o la estatal de protección civil debió hacer las revisiones y previsiones correspondientes, aunque ya ahogado el niño bien harían en tapar el pozo con una inspección exhaustiva en todos los comercios del centro de Hermosillo, para garantizar la seguridad de su clientela y sus empleados.

Guardería ABC.
En fin, duele en lo profundo del alma la tragedia de tantas familias hermosillenses y quienes, ante lo irremediable, deberán buscar en Dios el bálsamo de la resignación con el apoyo de la solidaridad ciudadana y de actos de gobierno reivindicatorios en favor de familiares de las víctimas, para que la cadena Waldo’s asuma sus responsabilidades por dicho siniestro.
Y como las tragedias siempre van acompañadas, ya ven lo ocurrido en Uruapan, Michoacán, en donde su presidente municipal Carlos Manzo Rodríguez fue asesinado a balazos por un grupo de sicarios mientras hacía un recorrido por una velación con motivo del Día de Muertos.
Fuerte el mensaje del crimen organizado, ya que Manzo Rodríguez fue por varios meses el referente de cómo las instancias de gobierno deberían enfrentar el flagelo criminal que azota al país y domina grandes extensiones del territorio nacional.
Más que abrazos en lugar de balazos, el munícipe promovió mano dura en contra de las bandas criminales, que particularmente en Michoacán actúan con singular impunidad con ejecuciones a líderes de productores, cobro de piso y demás atrocidades.
En múltiples ocasiones solicitó protección especial ya que los últimos meses, el alcalde había denunciado amenazas de muerte. El pasado 19 de septiembre solicitó apoyo al secretario de Seguridad Pública, Omar García Harfuch, al advertir: “No quiero ser un presidente municipal más de la lista de los ejecutados”, sin que tengamos idea si Batman atendió dicha solicitud.

Beer House en SLRC.
La parsimonia de las mañaneras, la frivolidad presidencial frente a cuestionamientos; el atractivo circense de esa interacción con una minoría de representantes de medios de comunicación frente a una gran mayoría de aduladores, endiosados, incondicionales y lame verijas del poder, hacen un conjunto de todos que tiene a la presidente Claudia Sheinbaum con el engrudo hecho bolas.
Las fatales inundaciones en cinco estados, las estupideces misóginas de Taibo II y que festina la señora inquilina de Palacio Nacional, ahora la tragedia en Hermosillo y el asesinato de Manzo Rodríguez, sumados a los distractores que se siembran acá y allá, no borran para nada la impunidad de quienes perpetraron el mayor atraco de la historia a los bienes de la nación y al patrimonio de loa mexicanos.
Una banda de delincuentes de cuello blanco se robó al menos 600 mil millones de pesos a través del tráfico ilegal de combustibles utilizando puertos operados, vigilados y administrados por el Estado Mexicano, con la participación de grandes buque tanques, cientos de tractocamiones y una red de comercialización tejida por altos perfiles del gobierno federal y de la familia del residente de La Chingada, perfiles militares de alto rango, directivos de aduanas de primer nivel y relevantes personajes de la política con el sello de la 4T y MORENA.
Pasan las semanas y nada se sabe de las indagatorias sobre esa red criminal y por lo que se ve, dadas las influencias de los involucrados, nada pasará y la presidente deberá de renunciar a sus afanes justicieros, si es que alguna vez los tuvo, porque los riesgos son extremos si es que se atreviera a ir al fondo de ese histórico atraco a la nación.

Carlos Manzo Rodríguez.
Por lo pronto, la señora Claudia Sheinbaum ya pudiera ser reconocida como la presidente de los lamentos, de las condolencias, de los pésames, porque ya tiene rato que eso es lo más relevante que hace y al menos eso resulta un avance respecto a su antecesor, ya que como se recordará, hasta para eso era tacaño dicho sujeto que evitaba incluso hacer referencia a tales tragedias para no dañar su investidura.
Y eso que durante su mandato el COVID 19 mató a 800 mil personas; el narco dejó 200 mil muertos, más otras tragedias por fenómenos naturales, que como sea, no le merecieron ningún lamento.
Y en asuntos positivos y sobre todo amables, ilustrativa sesión de la Mesa del Colectivo de Reporteros Sonorenses este viernes pasado, grupo de reflexión y análisis que reunido en nuestro feudito tuvo el honor y el privilegio de tener como invitada a la Jefa de la Oficina del Ejecutivo, Paulina Ocaña Encinas, joven mujer de comprobada lealtad a los principios e ideales de la llamada Cuarta Transformación y al proyecto de gobierno de Alfonso Durazo Montaño.
Por más de dos horas se abordaron los diversos temas y las acciones estratégicas emprendidas para elevar la calidad de vida de la gente de este estado, la problemática social y económica; sus responsabilidades en la supervisión de avance de obras de beneficio comunitario, con posicionamientos contundentes que atienden los esfuerzos de la administración estatal para avanzar en el desarrollo de la entidad, con el invaluable apoyo de la federación y colaboración de los ayuntamientos.

Paulina en CORSAS
También del rico anecdotario de su abuelito, don Samuel Ocaña García o todo lo que rodea a su incursión en carreras de fondo, su institucional relación y también amistosa con integrantes del gabinete legal y ampliado y el estricto ejercicio del doctor Durazo.
Fue un fuera de libretas en un ambiente de convivencia y no vamos a entrar en detalles porque así fue convenido, ya que más bien fue un ejercicio que desde nuestra perspectiva resultó en la recolección de un gran banco de datos que nos permitirá normar criterios para futuros abordajes sobre políticas públicas del gobierno estatal para atender la problemática social, económica y política de la entidad.
Por supuesto que la Paulina nos cae muy bien y creemos que tiene ante sí un amplio panorama de oportunidades en el servicio público y un futuro político relevante, pero por lo pronto, de destacar los buenos oficios de nuestro presidente Alfredo Ochoa, a nuestro tesorero, Ramón Olea, y a los compañeros Humberto Armas, Octaviano Rojas, Fernando Oropeza, Gustavo Valenzuela, Tony Romero, Tadeo López Rojas, nuestro invitado especial Francisco Cota, con un par de corsarios a los que les resultó imposible asistir, y mención especial por supuesto, para Juana María Olguín coanfitriona del ilustrativo encuentro. ¡¡Que se refifa!!.

