Yo soy amor. Yo soy salud. Yo soy paz. Reconozco que merezco ser amado, ser feliz y estar completamente sano. Hoy comienza un proceso profund
Yo soy amor.
Yo soy salud.
Yo soy paz.
Reconozco que merezco ser amado, ser feliz y estar completamente sano. Hoy comienza un proceso profundo de sanación en mi cuerpo, mi mente y mi espíritu. Me perdono sinceramente por cada error que cometí, sin excluir ninguno. Entiendo que en su momento hice lo mejor que pude, con lo que sabía.
También suelto todo enojo que alguna vez sentí hacia otros. Los perdono, porque no supieron ser como yo deseaba. Los dejo ir, y al hacerlo, libero mi corazón del rencor. Elijo cerrar definitivamente el pasado, para abrirme a un futuro en paz.
Renuncio a juzgarme, y dejo de juzgar a los demás. Entrego a Dios todo mi dolor, mis fallas y cualquier enfermedad. Confío en que todo será transformado en salud, paz y amor. Acepto mi presente tal como es, con paciencia, y me abro con fe al proceso de sanación total.
Merezco compartir el amor con las personas que me rodean.
Dios, tú habitas en mí y yo en ti.
Desde tu poder y tu amor divino, tomo la decisión de sanar por completo mi cuerpo, mi mente y mi alma. Abro mi corazón a tu luz infinita, que ilumina cada célula de mi ser. Todo pensamiento negativo se disuelve, y en su lugar brota una nueva vida, llena de alegría y amor.
Deseo curarme de corazón, para luego ser instrumento de sanación para otros. Así cumpliré mi propósito: expandir el amor y la verdad que habita en mí.
Gracias, Dios del universo.