En México los muertos se matan solos, luego los remata el Estado

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En México los muertos se matan solos, luego los remata el Estado

Claudia Sheinbaum, aseguró este miércoles que el ataque armado ocurrido en Irapuato, donde murieron 12 personas y 20 más resultaron heridas, -entre la

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Claudia Sheinbaum, aseguró este miércoles que el ataque armado ocurrido en Irapuato, donde murieron 12 personas y 20 más resultaron heridas, -entre las víctimas había menores-, aseguró que se trató de un enfrentamiento. Hipócritamente “lamentó” el hecho, pero no desperdició la desgracia de esos mexicanos, para volcar sobre ellos toneladas de excremento ¿Por qué acusa a los perjudicados? Primero, para lavarse las manos y luego para aplicar el principio gubernamental: los muertos son los únicos culpables de su fatalidad.
Pero, bendita tecnología, esas personas que celebraban a San Juan, departían alegremente, bailaban con sus hijos, demás familia y vecinos, lo que quedó registrado en un video, el cual era transmitido en vivo por la banda que amenizaba la fiesta en Barrio Nuevo. En ese material se aprecia cómo compartían de forma amena, los niños que participaban con los adultos, cuando de pronto se escuchó una descarga de balazos, que fueron dirigidos contra los asistentes.
Porque la señora, que presuntamente está a cargo del bienestar de todos los mexicanos, se atreve con total descaro, cinismo y con exceso de dolo a inventar que aquello fue un enfrentamiento, lo que forzosamente hubiera significado que las víctimas lucieran armas de fuego fajadas a la cintura o que hubieran hecho gala -como se ha vuelto toda una “costumbre”- de exhibir las armas largas, disparar con ellas, nada de eso se observa. Es más, el video evidencia fehacientemente el momento del ataque.
En otro video se ve como las víctimas quedaron esparcidas en la vía pública, en charcos de sangre también se observa cuerpos sobre la banqueta, algunos sin vida, mientras que otras personas son auxiliadas por los sobrevivientes. En la zona fueron localizados al menos 40 casquillos percutidos de arma de grueso calibre.
Como mujer, como madre, como ser humano Sheinbaum está reprobada total y absolutamente porque hay que tener estómago, hígado para acusar de esta manera tan descarada a personas asesinadas y heridas a mansalva. Salvo que ella este al tanto de una versión de los hechos que hasta ahora se desconocen. Información que deberá estar sustentada en pruebas, como las que ahora evidencian que fue un ataque a mansalva, sobre gente inocente.
Igual de detestable es que siga con su patética desaprobación al estado de Guanajuato, porque ahí gobierna otro partido político que no es el suyo. Entonces todo su esfuerzo para mantener a gandules de sus propias siglas partidistas, es la misma energía que aplica para victimizar a los muertos y culparlos de su propia tragedia, porque no están bajo el “manto protector” de Morena. Como si los ciudadanos fueran culpables de tener los gobiernos podridos que lamentablemente se padecen en el país.
Entre los fallecidos, la fiscalía estatal identificó a nueve hombres, un menor de edad de 17 años y dos mujeres, así como 20 personas lesionadas de las que no especificaron sexo o edades. Igual advirtieron que es posible que haya más víctimas, ya que algunas personas heridas fueron ingresadas a hospitales por medios propios.
En asuntos de Sonora, llama mucho la atención que asesinen al secretario del ayuntamiento de Yécora, Jafeth Holguín y a las horas sale Carlos Alberto Flores, Comisario de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC) a decir que el ataque armado que sufrió el funcionario no tiene que ver con su trabajo en el municipio. Ah caray entonces significa que ya se sabe el motivo porque el que fue acribillado, por el que ingresaron a su domicilio y ahí adentro, en su casa, el sicario le quitó la vida.
Entonces para mi entender ¿ya detuvieron al homicida material? O el autor intelectual ya explicó porque ocurrieron los hechos. Que la línea de investigación apunta hacia una situación de la vida personal del hoy occiso. Aquí el sentido común dicta que importa pito por lo que sea que lo hayan matado. Ocurrió un homicidio, alguien privó de la vida a un ser humano y eso es delito ¿O ya no? ¿Me perdí de algo? Las sospechas están a la orden del día y las versiones corren como reguero de pólvora, todas de tan peligrosas que parecen “verdades” de un mundo paralelo.
Por último, hace décadas que alguien de Bahía de Kino me habló para decirme que había una zona den esa playa habitada por zombis, estaban vivos a duras penas o solo para consumir la siguiente dosis de droga. A casi 20 años de aquella denuncia, vino a mi mente y me quedé pensando en ello y ¿qué imaginan que habrá pasado con todos esos adictos? Murieron por abuso de sustancia, los asesinaron por algún pretexto y/o ¿cuántos se salvaron y recuperaron la sobriedad?
La alerta y el pedido de ayuda que buscaba la señora ¿llegó a Bahía de Kino? Ajá si seguro (risas, carcajadas). De cuando acá a las autoridades les importa lo que dice y que pide la sociedad. Las ciudades son campos fértiles para cultivar toda clase de adicciones y las zonas rurales bueno aquello es devastación total, con mujeres que fueron madres ejemplares, hoy adictas al cristal. Que lucen irreconocibles.
El miércoles de la semana pasada estaba con una vecina, de mi antiguo y querido barrio, Palo Verde y uno de los que estaban en el domicilio, me dijo, mira ahí va el fulano de tal (para esto el chismoso se equivocó de nombre), pero luego con la espada afilada me soltó: el que era tu novio. Me levanté y ya solo alcancé a mirarlo de espaldas, en su forma de caminar lo reconocí. Es un solo esqueleto, él cree que aún vive.
Me impactó tanto verlo en ese estado de delgadez extrema, no puedo dejar de preguntarme ¿Cómo puede el ser humano dejarse tragar así por las drogas? Era tan lindo en todos sentidos, amable, buena onda. Su historia, por alguna mala decisión sus padres lo llevaron a vivir a casa de la abuela materna, pretextos sobran, lo que sí es que su infancia estuvo plagada de pobreza extrema. A la primaria iba descalzo en el invierno, que con los laureles que estaban en la asta bandera, se cubría los piecitos para mitigar las bajas temperaturas.
Hace dos años su abuela murió de viejita sí, pero además de hambre, me contó un vecino. A estas alturas sé que nadie puede socorrer y brindar apoyo, si el adicto no está dispuesto a pedir ayuda. Pero, también es un hecho que las heridas de la infancia, son difíciles de sanar, complejas de superar y es todo un desafío lograr ponerse a salvo. Ojalá que este ser humano se rinda ante la vida y avance hacia su sanación mental, emocional, física y psíquica. Realmente se lo merece.