Es recordar que viniste a este mundo con una luz única, una misión irrepetible y un alma que merece ser cuidada con amor y respeto. Caminar por el
Es recordar que viniste a este mundo con una luz única, una misión irrepetible y un alma que merece ser cuidada con amor y respeto.
Caminar por el desierto de tu transformación interior puede ser solitario a veces, pero también es profundamente liberador.
Cada paso que das hacia ti mismo es una semilla de abundancia, claridad y propósito que el universo recibe con gratitud.
No te sientas culpable por elegirte.
No te sientas mal por poner límites, por descansar, por decir que no o por sanar viejas heridas.
Tú también mereces tu propia atención, tu compasión y tu ternura.
Recuerda esto:
Cuando tú floreces, tu energía eleva al mundo.
Cuando tú sanas, abres caminos para otros.
Cuando tú te eliges, honras al universo que te creó.
Que cada día te acerque más a tu verdad, a tu paz y a tu poder interior.