Entretelones Samuel Valenzuela Anunciada los primeros días de octubre de 2022, la rehabilitación del Parque Recreativo La Sauceda requeriría d
Entretelones
Samuel Valenzuela
Anunciada los primeros días de octubre de 2022, la rehabilitación del Parque Recreativo La Sauceda requeriría de una inversión de 395 millones de pesos e incluiría un parque lineal de 12 kilómetros desde La Victoria, complejo que en su primera etapa se abriría al público en diciembre de 2023.
Incluso, a dicho proyecto se incorporaron 170 hectáreas en el cerro de La Cementara, adquiridas a precio de ganga por el Gobierno del Estado a una institución bancaria en mayo de 2023, cuando se insistía en la apertura al público de la Sauceda en diciembre de ese año.
Además, al anunciarse el propósito de urbanizar el lecho de la presa Abelardo L. Rodríguez, se dijo que tal controvertido proyecto estaría enlazado y ser parte de lo que será o sería un bosque a la altura del Bosque de Chapultepec de la Ciudad de México para el disfrute de los hermosillenses y sonorenses.
Y por fin, resulta alentador que tan fantástico proyecto parezca estar casi listo en su primera etapa, para que dentro de más o menos un mes y medio se abra al público el humedal, área de juegos para infantes, un espacio para capacitaciones en manejo y respeto al tránsito vehicular que incluirá carritos o go karts, y para la práctica de beisbol, así como el teatro al aire libre donde se llevará a cabo un concierto popular inaugural.
De la proyectada inversión de casi 400 millones de pesos, ya se habrá gastado la mitad, pero por supuesto que vale la pena presenciar otra vez vivo un espacio que permaneció en el abandono durante alrededor de 25 años, sin importar las evidentes demoras y el retraso de la conclusión de la primera etapa por al menos año y medio.
Es que como se sabe, el arranque de la gestión del gobernador Alfonso Durazo Montaño fue sumamente optimista, con anuncios espectaculares respecto a un altero así de proyectos de infraestructura con mega inversiones, algunos de los cuales se mantienen en el tintero y otros con evidente retraso en su conclusión, pero que ahí la llevan.
No tenemos idea si sigue vivo el proyecto del parque lineal desde La Victoria o el esquema de senderos, rutas para bicicross y puntos de observación estelar en La Cementara, pero aquí lo importante es que, a lo mejor, en el arranque de la primavera de este año, La Sauceda reabra sus puertas y vuelva ser un punto de reunión para las familias de la capital de Sonora.
Como sea, excelente el arranque del año para el gobernador Durazo con recorridos de supervisión de obras de infraestructura deportiva en Hermosillo y de destacar la transformación de la playa Huatabampito allá en el sur de Sonora, donde la construcción del malecón ya presenta un 70 por ciento de avance, y la verdad es que apantalla la transformación de uno de los espacios playeros más bellos de la entidad.
También el presidente municipal de Hermosillo, Antonio Astiazarán Gutiérrez tuvo un arranque muy optimista al dar el banderazo de salida de las obras del paso a desnivel del Colosio y el Solidaridad que será ejecutado con recursos propios, que con una inversión de poco más de 400 millones de pesos, se asegura serán concluidas en febrero de 2026.
Aunque sin mayores efectos, esta magna obra indispensable para la movilidad capitalina ha generado muy malas pasiones entre sectores retrógradas del oficialismo representado por MORENA y verrugas a quienes, por lo visto, les corre muy despacio la sangre o recibieron instrucciones tardías, porque solo así se entiende que al 15 para las 12 hayan emprendido sus absurdas acciones de rechazo, cuando dicho proyecto fue anunciado desde hace meses.
Ya veremos cómo lidia la administración municipal a esa estupidez política del partido oficial y aliados o si en efecto, puede ejecutar dicha obra sin afectar a otras que si bien no son tan espectaculares ni tan costosas, también son indispensables, cuando en el curso de este año se prevén penurias presupuestales, que deberán ser maximizadas por los mismos opositores al desarrollo de Hermosillo.
Como se dice comúnmente, en lugar de dejar que “se mate solo”, tratan de acotar el crecimiento del alcalde capitalino frente al proceso electoral del 2027, cuando resulta obvio que el Toño no anda enfocado en dicho propósito y así lo dejó ver en la recta final de 2024 en cuanto a su nula interacción con la sociedad a través de los medios de comunicación y al incumplimiento de pago a proveedores, cuyos efectos negativos son mucho mayores que las estulticias de doña María Eduwiges y compañía.
Pues qué necesidad hay de eso, porque como tanto se ha dicho, el gobernador dispone de varias cartas con las cuales puede que la mayoría del electorado estatal revalide su gestión hasta el 2030, citándose principalmente al secretario de Gobierno Adolfo Salazar Razo, pero qué, pero le ponen a la alcaldesa de Guaymas, Karla Córdova, ya con probada efectividad en materia administrativa y no se diga su alta rentabilidad electoral, además de rodearse de un equipo muy hábil para esos menesteres.
Se habla también de la senadora Lorenia Valles o de su homólogo, Heriberto Aguilar, pero en política, la tacañería, ser come solos y miserables, además de andar colgados de otros para sobresalir, siempre cobrará caras facturas frente a quien decidirá esas cosas, que además sabe la clase de rémoras que integran sus equipos.
Por otra parte, se mantiene el cierre de la frontera EEUU-México para el ganado en pie de nuestro país, luego que desde el 22 de noviembre pasado el Servicio de Inspección Sanitaria de Animales y Plantas de Estados Unidos (APHIS por sus siglas en inglés) del Departamento de Agricultura de Estados Unidos determinó dicha medida al registrarse animales que ingresaron a territorio mexicano desde Centroamérica infestados por el gusano barrenador.
Ya se tiene un protocolo de inspección acordado entre ambos países con miras a una reapertura controlada de la frontera y este lunes andarán en Sonora inspectores de la autoridad gringa, que se supone es el preámbulo para que antes de cerrar enero el ganado proveniente de Sonora cruce a territorio de Estados Unidos.
Se asegura que no hubo pérdidas para en sector ganadero derivado de dicho cierre, pero en el caso del pequeño ganadero en el cual nos consta, contrario a la tradicional práctica anual, no pudieron vender su becerraje antes del fin de año y el que lo hizo debió aceptar precios muy castigados, pero necesario para sacar los compromisos de fin de año, además de resentir agotamiento del agostadero por la permanencia de esos animales, en el marco de la fuerte sequía en proceso.
Por cierto, ¿y las equipatas?, que como fenómeno meteorológico anual representaban un aliciente y generaba aportaciones a las cuencas de los ríos y que ahora brilla por su ausencia cuando el sistema de presas de esta entidad apenas almacena un 16 por ciento, sin que se adviertan acciones gubernamentales de apoyo extraordinario para el sector agropecuario.







