El Exilio Juana María Olguín Tarín Allá va la burocracia de Sonora al mitin al zócalo, con todos los gastos pagados. Es por cinismo, porque son
El Exilio
Juana María Olguín Tarín
Allá va la burocracia de Sonora al mitin al zócalo, con todos los gastos pagados.
Es por cinismo, porque son desvergonzados, pero aquí y allá las fotografías de la salida de los camiones desde distintas partes del país, hasta la ciudad de México para apoyar a la candidata de palacio nacional en lo que será su inicio del inicio, iniciado de la campaña por la presidencia de la República, Claudia Sheinbaum.
Ayer miércoles salieron también seguramente funcionarios del gobierno de Sonora e invitados, con respaldo de viáticos, estancia y alimentación, gasto que se estima será de al menos de 5 mil pesos para cada uno de la perrada, que la aristocracia se cocina aparte.
Rola una videograbación que recoge el testimonio visual y el audio: “¿a dónde van? A ciudad de México, respondieron ¿De acarreados? Sí, y agregó muy acomedido: “nos dieron 5 mil pesos”. Ajúa, sí señor, la dichosa austeridad republicana es para los “burros de mi compadre”, no para asuntos vitales e importantes como apoyar a la candidata del partido en el poder.
Ayer miércoles 28 de febrero salió un camión con funcionarios del Supremo Tribunal de Justicia (STJ) igual puede que vayan de varias dependencias, quienes con singular alegría reportaban en que parte del trayecto se encontraban y por si estaban con el pendiente desde el jueves llegaron al centro del país. Descansarán en algún hotel, comerán y beberán por cortesía de todos los habitantes de este estado de Sonora. Antes como antes, ahora como ahora.
Cuánto habrá gastado Sonora en los últimos dos años y medio en que literal se ha mantenido en campaña el caro habitante de palacio nacional ¿cuánto costó el acompañamiento a cada una de las 4 corcholatas? Y ahora 5 mil pesos por piocha al que acude al mitin este viernes 1 de marzo. Lo bueno es que no son iguales. Son decadentemente peores.
Se han dado cuenta que hay de marchas y manifestantes, hay trato diferenciado. Si son mujeres hay que atropellarlas y violentarlas con la policía de la ciudad de México ah pero que no sean normalistas y si son de Ayotzinapa olvídense. Pueden romper, destruir, lanzar bombas molotov o disparar con resorteras. Aquí no ha pasado nada que siga la fiesta. Este jueves atacaron el edificio de Relaciones Exteriores, luego a gusto se fueron tranquilos, a palacio nacional.
El miércoles le dieron su ración de violencia y odio a la secretaría de gobernación y con el gozo y disfrute que les da saberse impunes.
Apoyo irrestricto a los estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa “Raúl Isidro Burgos” quienes se dieron su tiempo a las afueras de Relaciones Exteriores (SRE), en la alcaldía Cuauhtémoc lanzaron 15 petardos, rompieron cristales para exigir la extradición de Tomás Zerón de Lucio, exdirector de la Agencia de Investigación Criminal. Eran alrededor de 250 personas que se trasladaron en cuatro autobuses desde la plancha del Zócalo capitalino.
Por cierto, los autobuses donde se movilizan ¿ahora si los rentaron? ¿Se los alquiló el gobierno federal? O una vez más y conforme a los usos y costumbres se trata de unidades secuestradas. Pero hay de delincuentes a delincuentes, como se ve y consta hay quienes tienen permiso para casi cualquier cosa.
Pero que no se trate de marchas encabezadas por mujeres, madres de hijos desaparecidos porque aparecen toda clase de corporaciones policiacas para acosar, acorralar y tratar de contenerlas. Hay de víctimas a víctimas a unas las termina de aniquilar el Estado. La destrucción tiene permiso.