El poder se ejerce y las mayorías se aplican, tal como ocurrió en la sesión de la legislatura de Sonora, donde la bancada del partido oficial y sus ve
El poder se ejerce y las mayorías se aplican, tal como ocurrió en la sesión de la legislatura de Sonora, donde la bancada del partido oficial y sus verrugas, aprobaron hacer concurrente la elección presidencial y la de la gubernatura en el 2030.
Hay muchas obviedades en el mayoriteo que dio trámite a tan adelantada reforma electoral, pero la más importante es la débil, inconsistente y simplona fundamentación de la iniciativa anunciada por el gobernador Alfonso Durazo Montaño el 13 de septiembre pasado y posteriormente enviada al Congreso del Estado.
Tenemos la percepción de que a sabiendas de la mayoría calificada que disponen a placer en la Cámara de Diputados, quien haya elaborado la exposición de motivos que dio lectura el diputado Jacobo Mendoza Ruiz, presidente de la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales, fue displicente en la conjunción de datos, cronologías e invocaciones sin sustento sobre referentes en otros Estados.
Llama la atención el sentido de urgencia que hubo en ese trámite con una reforma de gran calado, aunque dicho apresuramiento no atiende ni cumple lo previsto por la figura del parlamento abierto, con presuntas tres reuniones de consulta que simplemente fueron descaradas simulaciones que no atendieron los términos de la Ley Orgánica del Poder Legislativo.

Jacobo Mendoza
Así las cosas, para explicar el porqué el apuro para una reforma electoral que tendrá vigencia a partir de octubre del 2026, el diputado Mendoza Ruiz pontificó sobre la visión de Estado y de futuro del gobernador Alfonso Durazo Montaño, que incluso generó aplausos entre la representación morenista y verrugas, como si dichas virtudes del mandatario las acabaran de descubrir.
Impecables los posicionamientos de Rosa Elena Trujillo Llanes, quien a nombre de la bancada del MC, de forma muy respetuosa y muy bien documentada hizo pedazos la iniciativa y de igual forma lo hizo la legisladora del PAN, Alejandra López Noriega, al anunciar su rechazo a la propuesta, dejando abierta la posibilidad de que ante lo tan mal fundamentada; sin tomar en cuenta los principios constitucionales que derivaron en concurrencias en otros estados, así como por no cumplirse lo del parlamento abierto, la reforma aprobada podría ser impugnada y objeto de controversia constitucional.
Los argumentos más importantes para impulsar o apoyar la concurrencia de la elección presidencial con la de la gubernatura de Sonora, parten de bases sumamente cuestionables, ya que es falso que vaya haber ahorro de recursos; que se incrementará la participación ciudadana en la jornada electoral y que lo que en verdad resulta una fantasía insostenible, permitirá homologar planes de desarrollo de Estado y la Federación, como una forma de justificar que esa marrullería tendrá impacto social favorable.
No se espera mucho de la diputada Paloma Terán y en efecto muy poco qué aportar de esta fashiondiputada al emitir el posicionamiento del PES en apoyo a la iniciativa, que en todo caso le recomendaríamos exigirle más a quien le hace la tarjeta y que practique más su lectura, para a lo mejor así no incurrir en agresiones innecesarias contra sus pares, que sin importar su condición de minorías, merecen respeto, que en todo caso las diputadas López Noriega y Trujillo Llanes le dieron una lección de clase y cortesía política al exponer sus ideas, propias, al pleno.

Paloma y el Sebas
Por cierto, nos resultó sumamente extraña, fuera de proporción e innecesaria, la conducta fanfarrona y retadora del diputado del PT, Sebastián Orduño Fragoza en su pretendida respuesta a las comedidas observaciones que de forma por demás institucional expusieron las coordinadoras de las bancadas del PAN y de Movimiento Ciudadano.
Sabe qué le picó al Sebas o que lo hizo enojar para su innecesario exabrupto, cuando ya su compañero de bancada había dado lectura a la recitación de apoyo a dictamen que finalmente fue aprobado por la mayoría calificada e incluso llama la atención que ante la obviedad del destino de la iniciativa, se abstuvieron de pedir la palabra Fermín Trujillo Fuentes, del panalito, y del Verde, Brenda Córdova Búzani, cuyos votos aprobatorios no requieren justificación alguna.
Bueno, también resultó innecesaria la respuesta del diputado naranja Jorge Russo al caer en la provocación del legislador guaymense, quedando solo por verse si se interpone alguna controversia sobre la constitucionalidad de dicho trámite, aunque desde nuestra perspectiva, las oposiciones mejor deberían de ocuparse en ser competitivas y en lo posible lograr la mayoría calificada en el Congreso del Estado y así están en condiciones de hasta revocar en el próximo trienio la reforma constitucional con la que este jueves fueron mayoriteados.
En fin, entre fanfarronerías y retos propios de escolapios de uno y agresiones y palabrería inconexa de otra, nadie refutó que en estos momentos hay mayores prioridades que legislar sobre un tema que tendrá vigencia hasta dentro cinco años, mientras en estos tiempos persiste la matanza principalmente y en mayor medida en la región de Guaymas y Empalme, en tanto que en Agua Prieta es tal el control mafioso que allá no pasa nada, el narco no se ve, pero se siente, entre otros graves problemas que requieren la atención inmediata de las instancias de gobierno, incluida la Cámara de Diputados.

Rafael Ramírez
En el curso de la sesión, el diputado Rafael Ramírez propuso punto de acuerdo en el que en pocas palabras solicita al presidente municipal de Hermosillo, Antonio Astiazarán Gutiérrez, que haga todas las previsiones presupuestales, las gestiones necesarias y diversas acciones, para que en el 2023 se pavimenten, reparen y rehabiliten calles de comunidades rurales y caminos vecinales que las interconectan, aventándose una sesuda exposición sobre el gran impacto que tendrían entre sus habitantes esas acciones del gobierno municipal.
Por supuesto que es legítima y valida la propuesta y solicitud y así es reconocida, pero lo que no se entiende que no haya votado a favor de la propuesta del diputado del PAN, Armando Gutiérrez, para que al punto de acuerdo se agregaran al titular de la SIDUR, Marcelo Aguilar y al de Hacienda, Omar del Valle, para efectos de sus indispensables participaciones en este tema.
Desde nuestro punto de vista, a lo mejor al diputado en mención le corre muy despacio la sangre y las ideas le fluyen muy lentas, toda vez que si tiene tan altruistas propuestas para beneficiar a comunidades como la Misa, San Bartolo, Molino de Camou, San Pedro, el Tazajal, La Victoria y demás, debió coordinarse y trabajar junto a regidores de Morena y aliados en el cabildo para pedirles proponer esas acciones y no salir con ocurrencias ya cuando el paquete económico del municipio de Hermosillo fue aprobado por unanimidad, pero como sea, estamos seguros que “El Toño” no incurrirá en burlas por sus estulticias ni le preguntará sobre de que sabor quiere su nieve.
Mientras tanto, tal como lo comentamos en el anterior despacho, el gobernador Durazo Montaño asistió como invitado especial a la reunión plenaria de la CTM que conjuntó en Hermosillo a liderazgos de 300 sindicatos de todo el Estado.

CTM, Javier y Alfonso
Resulta por demás alentador la excelente relación institucional entre el mandatario estatal y el sector obrero representado por Javier Villarreal Gámez, lo cual sin duda representa el troncón de en medio para la paz laboral que se mantiene en Sonora en estos tiempos.
Sabe cual sea la reacción entre sectores dogmáticos de la 4T ante la excelente relación que se percibe entre el líder obrero y el gobernador, quien como sea, dispone de tan fuerte liderazgo que no creemos que nadie se atreva a cuestionar tan cercana relación que en todo caso repercute de buena forma para la entidad y abona bien a la gobernanza.
Y lo que sea de cada quien, Durazo Montaño ha logrado con Villarreal Gámez y la CTM, una relación más estable, amable e institucional que en las dos anteriores administraciones estatales, lo cual ya es mucho decir.

Javier Lamarque
El gobernador también estuvo en Ciudad Obregón en donde más de un año después como alcalde, Javier Lamarque Cano arrancó con obras para reparar las destrozadas vialidades de esa golpeada comunidad, en donde andan movidas las aguas por el ninguneo presupuestal que es objeto el Instituto Tecnológico de Sonora y que incluso ya generó inédita manifestación popular.