El éxito tiene muchos padres, la derrota es huérfana

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El éxito tiene muchos padres, la derrota es huérfana

Hoy 8 de junio se cumplen seis años que luego de dura, extenuante y desigual batalla de su familia, Gisela Peraza Villa fue puesta en libertad luego de cuatro años en que sus patrones el ex gobernador Guillermo Padrés y su esposa, Iveth Dagnino la acusaron de robar 5 millones de pesos en una maleta -de cientos de bolsos que había con dinero en efectivo- en la recámara de la pareja

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Juana María Olguín

Hoy 8 de junio se cumplen seis años que luego de dura, extenuante y desigual batalla de su familia, Gisela Peraza Villa fue puesta en libertad luego de cuatro años en que sus patrones el ex gobernador Guillermo Padrés y su esposa, Iveth Dagnino la acusaron de robar 5 millones de pesos en una maleta -de cientos de bolsos que había con dinero en efectivo- en la recámara de la pareja. Además de joyas de la señora. Los hechos ocurrieron en marzo de 2011 y después la empleada fue secuestrada, torturada, encarcelada y una larga travesía de vejaciones.

El asunto se mantuvo casi en total secreto, hasta que la madre de la víctima, Eloísa Villa Luna, ama de casa radicada en el municipio de Ures, militante del Partido Acción Nacional (PAN) y la hermana menor, Delma empezaron a notar que no se reportaba, que no contestaba teléfono, la negaron en casa de gobierno, que era su área de trabajo, hasta que ella liberada por los Padrés Dagnino llegó a su casa, con las lesiones visibles de la tortura.

Se fueron a presentar una queja ante la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH), entonces a cargo de Raúl Ramírez Ramírez, quienes sentenciaron que no había pruebas fehacientes de la violencia ejercida y desestimaron cualquier recomendación al entonces gobernador del estado y de sus funcionarios. Pero pagaría caro el atrevimiento de denunciar, la víctima y su familia, sufrieron invasión a la propiedad, destrozos, robo de dinero, amenazas, acoso y un largo etcétera.

Aparentemente todo el abuso en torno a Gisela Peraza fue porque Padrés Elías descubrió un presunto amorío de su esposa y allí empezó el conflicto. Iveth Dagnino quiso esconder pruebas y entregó a su entonces empleada un teléfono celular donde había fotografías de ella con el implicado para que lo destruyera. Aquella desoyó la orden de desaparecer el equipo y contrario a ello se lo dio a una sobrina para que jugara. Pues eso fue lo que provocó la invasión de la casa de la hermana, donde la policía estatal destrozó, rompió para localizar el celular.

En casa de gobierno había cantidades de bolsas, que llevaban distintos personajes las cuales presuntamente estaban llenas de dinero, una de esas es la que desapareció con 5 millones de pesos. De algún modo se escapó la información que un miembro de esa familia tenía problemas con el juego y que no era la primera vez que contraía deudas considerables. Pero el exmandatario y su esposa decidieron echar encima de la empleada y del jefe de custodios, Ernesto Munro la responsabilidad por el faltante.

La afectada, que pasó cuatro años en prisión por las acusaciones referidas, pero no fue una presa más, sino que fue llevada al Cereso Huatabampo, luego en horas de la madrugada, la volvieron a sacar a golpes de su celda para llevarla a San Luis Río Colorado. Una saña de los Padrés Dagnino que ha quedado en total impunidad. 

El 22 de enero de 2019 muy temprano falleció, Juan Antonio Ortega, quien tomó el caso de Gisela Peraza Villa. La última vez que platiqué con él, se veía muy mal, estaba muy preocupado, lloroso por su salud y su sobrevivencia económica. Su deceso sobrevino y los expedientes que empujó hasta donde sus fuerzas le alcanzaron guardan el sueño de los justos o de las complicidades.

Hasta su último aliento se lamentó de la inacción de la procuraduría de justicia del estado, la que ha permito hasta ahora que el tal, Agustín Rodríguez esté tan cómodo y feliz como puede estar un ciudadano que no torturó y encarceló a otro. Los delitos que cometió como secretario particular de Padrés Elías entre otros más funcionarios del gobierno padrecista no alcanzan fianza, pero nadie quiere hacer cumplir la ley. A los pocos que ha acusado el gobierno actual, todos cuentan con una puerta rotativa, entran por un lado y salen por el otro. Para colmo que piensan desestimar el caso. 

Si ganan las elecciones es porque la gente está convencida del “cambio verdadero”, pero cuando pierden resulta que fue… ¡por una campaña de desprestigio! Ni tantita autocrítica, vaya desgracia, pero al pueblo lo que pida. Suerte, mucha suerte para los crédulos, la van a ocupar créanme.