La menor de 11 años que viajaba en un camión de la costa de Hermosillo, hacia campos agrícolas en Empalme vive un calvario, una pobreza extrema que aunado al valemadrismo oficial bueno aquello se pone muy triste
Juana María Olguín
La menor de 11 años que viajaba en un camión de la costa de Hermosillo, hacia campos agrícolas en Empalme vive un calvario, una pobreza extrema que aunado al valemadrismo oficial bueno aquello se pone muy triste. No ha podido seguir su tratamiento en Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) porque no tienen para pagar fotografías para hacerle su identificación. Su carita aún está morada por los golpes que le dejó el percance, pero así permanece, olvidada por todos.
El periodista de Megacanal, Martín Vallejo estuvo por la casa de la pequeña donde habló con la abuela materna, la señora, María Félix Gaona, quien informó que la menor se encuentra bien, pero que aún sufre de dolores en el rostro. La dama dijo que desconocía que la niña se hubiera ido a trabajar, lo cual pudo lograr con un acta de nacimiento prestada.
Abuela quiere quedarse con su nieta para que no trabaje y darle escuela, pues su hija, madre de la pequeña se hunde en las drogas y la abandonó al igual que a otros hijos. Para ayudar a la niña pueden acudir a la calle 4 de octubre # 87, entre Elías Calles y Rosario Ibarra de Piedra, colonia 26 de octubre, poblado Miguel Alemán, o comunicarse a (662) 4 65 67 60.
En más de niños, un menor de 13 años fue ejecutado la tarde del sábado al Sur de Ciudad Obregón. Viajaba en una motocicleta acompañado de su padre, quien corrió para refugiarse en una vivienda y salvarse así, no su hijo.
Hay bebés que consumen de forma involuntaria drogas. Ah, pero ya la autoridad detuvo a los padres luego que los dos adultos y el pequeño de 11 meses dieron positivos en el examen toxicológico a la metanfetamina. El infante recibe atención en el Hospital Infantil del Estado de Sonora (HIES). Casi un año desde su nacimiento y nadie pudo imaginar que el par de adictos desatendía al hijito o peor aún con “eso” lo callaba.
Apenas amanecía el pasado sábado 8 de febrero cuando el policía, José Francisco Olguín Coronado salía de su casa, para ir a su trabajo cuando fue víctima de una celada. El oficial fue uno de los que participó en los hechos del pasado 5 de febrero, en la colonia Valle del Márquez, donde al repeler la agresión murieron dos personas que entre otro más presuntamente tenían secuestrado a un menor de 16 años. Es imposible no pensar en lo obvio, en lo malditamente evidente ¿Quiénes sabían dónde vivía el funcionario? Porque no son públicos los domicilios de los agentes.
Un estudiante del Instituto Tecnológico de Nogales provocó la cancelación de clases este lunes luego de advertir que se convertiría en un Dios por matar a más de 100, con lo que sería admirado por niños y jóvenes en el mundo. La semana pasada se suicidó una joven en Hermosillo. Nadie captó nada, ni sus más íntimos amigos. Provenía de una familia que la amaba, protegía y acababa de comprarle una casa. Hay problemas gravísimos de salud mental ¿imperceptibles? O no nos vemos la nariz porque hemos perdido la habilidad para distinguir lo obvio, lo evidente.
Qué quiere Andrés Manuel López Obrador de los mexicanos ¿qué necesita para empezar a cumplir con lo mínimo y elemental como atender a los niños con cáncer? Hoy otra vez se reúnen familiares de pacientitos con esa enfermedad de distintos hospitales del país. Es el tercer encuentro y se verán con funcionarios de las secretarias de Gobernación y Salud para conocer el informe sobre avances en la compra y distribución de medicamentos oncológicos. Ah, pero se va a rifar el avión sin avión, con dinero, sin dinero. A los activistas forzados ante esta terrible situación los han acusado de todo, menos de amar a sus pequeños a los que temen perder ante la infamia actual.