Justo este lunes en que se celebró un año más de la expropiación petrolera se esperaba que Andrés Manuel López Obrador (AMLO) anunciara a todo pulmón que las gasolinas bajarían de precio, un poco, de pérdida algo y no ocurrió ¿por qué? No le da la gana. Es un gozo para él y su nefasto gabinetito cobrar el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) que le deja cuantiosísimos recursos a la actual administración, no importa que sea sangrando la economía de la clase trabajadora

Juana María Olguín
Justo este lunes en que se celebró un año más de la expropiación petrolera se esperaba que Andrés Manuel López Obrador (AMLO) anunciara a todo pulmón que las gasolinas bajarían de precio, un poco, de pérdida algo y no ocurrió ¿por qué? No le da la gana. Es un gozo para él y su nefasto gabinetito cobrar el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) que le deja cuantiosísimos recursos a la actual administración, no importa que sea sangrando la economía de la clase trabajadora.
A propósito de la celebración y del manoseo que año con año se hace con respecto a la ruina en que se encuentra Petróleos Mexicano (Pemex), donde los daños a su patrimonio por cada gobierno corrupto que se ha padecido. Pues esa institución es una ruina, fierros viejos e inservibles que la actual administración quiere volver a limpiar, pintar, acomodar ¡Oh mi Dios! Es como querer resucitar una momia que ha estado en total pudrición.
Como si las pérdidas ya no fueran cuantiosas para el pueblo mexicano, que jamás ha merecido de jodido el litro de gasolina completo, ahora avisa la actual administración que vienen empresas internacionales a cobrarnos por lo mismo que se “hizo” en la era de Enrique Peña Nieto. Se pagará de nuevo y si eso no fuera suficientemente malo, que las compañías que vienen a hacer negocios pintando los fierros viejos traen una cola hedionda y apestosa de demandas por corrupción. A una de ellas la llaman la Odebrecht Argentina, por sobornos que dio a los mandatarios Kirchner.
Que cosa tan fea la violencia descarnada que se vive en varios países, ataques masivos con propósitos infaustos, que ha dejado cientos de muertos. En México los grupos armados y poderosos hacen y deshacen y llegan al descaro de mediante videos amenazar a grupos rivales, al gobierno, nombre que va. En ese escenario es que hay que tomar con calma el secuestro del regidor en Tamaulipas a quien se ve sometido, dominado por hombres con los rostros cubiertos y en pocas palabras al funcionario público le hacen responsabilizarse de delitos varios de orden federal.
Se trata de Herbey Herrera García quien fue reportado como desaparecido, quien confesó en el video, ser delincuente, pero en calidad de secuestrado, sometido por hombres fuertemente armado, te declaras culpable de lo que sea. Lo bueno es que la clase política anda liada en sus negocios, en sus componendas, en sus rivalidades, en sus bautizos para hacer más compadres, total.
Incendiado se encuentra el municipio de Nogales. A diario deben recoger personas asesinadas, como este domingo, donde hasta un menor de 15 años fue una de dos víctimas. El colmo de la brutalidad despiadada fue el homicidio contra un varón, al que abrieron todo desde el cuello hasta su vientre, le sacaron todos los órganos le dejaron solo las costillas. Es demasiada maldad la que habita en esos seres capaces de hacerle tanto daño a otro. Pues que lo sepan todos, eso tarde que temprano será saldado en esta vida o en la otra.
Se apacigua un poco la violencia de un lado y empieza a calentarse el terreno hacia otro punto, lo bueno es que nadie sabe cómo hacer frente a este estado de cosas, a la sociedad solo le queda confiar, confiar y esperar que solo lindas cosas le ocurran porqué sí, porque se es decente, se actúa bien y eso todo trae buenos resultados. Que así sea pues.