Porque Grupo México consideró que el daño estaba resarcido, el Fideicomiso Río Sonora se dio por concluido en febrero de 2017, quedando pendientes le
Porque Grupo México consideró que el daño estaba resarcido, el Fideicomiso Río Sonora se dio por concluido en febrero de 2017, quedando pendientes le entrega de 750 millones de pesos de un total de 2 mil millones que fueron acordados una vez que la empresa, Grupo México, derramara metales pesados tóxicos en las aguas de los ríos Bacanuchi y Sonora.
El recurso restante se implementaría en la construcción de una clínica de especialidades, la Unidad de Vigilancia Epidemiológica y Ambiental de Sonora (UVEAS) en Ures, la cual brindaría atención durante 15 años a los pobladores afectados en su salud por el contacto con el agua contaminada, sin embargo, el recurso nunca llegó a las arcas federales para su aplicación, confirmó Wenceslao Cota Montoya.
El delegado de Gobernación en Sonora, dijo que sólo se utilizaron mil 250 millones de pesos para limpieza del río, compra de agua potable y apoyos económicos a los pobladores; el resto no fue liberado por la empresa, dado que consideraba el daño como algo reparado.
“No se aportó porque no hay disposición de ese dinero por parte del Fideicomiso; el fideicomiso terminó su función entre febrero y marzo de 2017, se notificó a los presidentes municipales en turno acerca de que el fideicomiso había dejado de cumplir su cometido porque se había logrado el objetivo de resarcir los daños”, detalló.
Explicó que Grupo México dividió los recursos para su implementación en cuatro etapas, mismas que serían entregadas al Gobierno Federal para su administración. De las cuatro bolsas de 500 millones de pesos cada una, no fue entregada la última mientras que, de la tercera, sólo fue entregada una parcialidad.
Además, detalló que, de los 22 mil pobladores afectados por la contaminación en el Río Sonora, hubo quienes recibieron hasta cuatro veces el pago por resarcimiento de daños cuando otros tantos no recibieron ni un sólo peso del apoyo, situación que causó molestia entre los habitantes.
El delegado de Gobernación en el estado, detalló que en total fueron 800 millones de pesos lo que se entregó en pagos provenientes del Fideicomiso a los pobladores, existiendo disparidades en la entrega de recursos y, por lo tanto, en los beneficiados, debido a que muchos se inscribieron solicitando apoyo bajo varios conceptos.
Los habitantes aseguraban en los documentos que eran población afectada en diversas actividades como ganadería, agricultura, comercio, salud y tomas de agua domiciliaria.
“Hubo mucha gente que todavía se dolía de que no les habían pagado, ya sea por el concepto de ganaderos, agricultores, de la salud, o por concepto de tomas de agua domiciliarias, entonces había muchos que decían que no les habían pagado, como también hubo muchos que no nada más un pago recibieron, sino hasta cuatro”, indicó.
Conforme a los lineamientos que armó el Fideicomiso Río Sonora, estos desequilibrios en el reparto del recurso, no pudieron considerarse como irregularidades o anomalías en la entrega, debido a que el dinero sería entregado dependiendo del rubro afectado y, en este caso, muchos pobladores registraron que pertenecían a tres o cuatro rubros de los señalados.