Al tiempo de definir nuestro voto y depositarlo en la urna, el compromiso cívico adquirido es de monumentales dimensiones, porque junto a otros ciudad
Al tiempo de definir nuestro voto y depositarlo en la urna, el compromiso cívico adquirido es de monumentales dimensiones, porque junto a otros ciudadanos estamos decidiendo el futuro de nuestras familias, lo cual reduce los márgenes del cantaleteado argumento del derecho que tenemos a equivocarnos frente a tanto que está en riesgo.
Cierto, tenemos el derecho a equivocarnos, pero no en la magnitud que represente un salto al vacío que lleve a nuestros hijos y familias perder calidad de vida que con tantos esfuerzos ha sido conseguida, ya que mal que bien, hay empleo, ingresos decentes y satisfactores de orden material que merecen continuidad y con opciones de mejorarlos.
De ese tamaño es el reto que tienen las inmensas clases media de este país, bombardeadas durante los últimos meses por tres propuestas muy bien definidas: la que pretende arrasar con todo y prácticamente partir de cero en los grandes ejes del desarrollo nacional en los últimos 100 años; la regresiva, clasista y retrograda que propone ajustes convenientes a sus intereses, y la que a partir de lo alcanzado hasta ahora, catapultar al país hacia nuevos estadios de desarrollo desde una óptica ciudadana.
Dicen que en la contienda presidencial la suerte ya está echada y que Andrés Manuel López Obrador hará bueno el dicho ese que dice que la tercera es la vencida, aunque proliferan elaborados algoritmos, sesudas cábalas trigonométricas y cálculos algebraicos, que señalan que a fin de cuentas será José Antonio Meade el ganador de la elección, dilema que será revelado en forma oficial a eso de las 10 de la noche del próximo domingo.

Manuel Ignacio Acosta
No nos vamos a meter en berenjenales donde la chairiza no tiene contemplaciones, pero al menos en Sonora las tendencias señalan un rumbo contrario a la elección presidencial, quizás porque los ciudadanos de este estado somos más inteligentes, no hay tantos con aspiraciones a ser mantenidos por el gobierno sin trabajar y tampoco tantos frustrados y ansiosos de revancha y cobranzas por actos de corrupción oficial que dicen haber sido testigos, pero cuyo nivel de vida es parte de dicha corrupción.
Luego del histórico error cometido por la mayoría de los electores en la elección por la gubernatura en el 2009, los sonorenses pudimos enmendar la plana seis años después, rectificación cuyos resultados están a la vista en menos de tres años de la extraordinaria gestión de la gobernadora Claudia Pavlovich, quien pudo revertir las condiciones de desastre que le heredó la incompetencia y corrupción del PAN como gobierno.
Por su parte en Hermosillo, Manuel Ignacio Acosta realizó lo que en 20 años no hicieron sucesivas y aldeanas administraciones del PAN y ahora la capital de Hermosillo luce remozada en sus principales vialidades; iluminada y con remodelados espacios para la convivencia en colonias populares; más eficientes servicios públicos, mejoría notable en seguridad y sobre todo, honestidad y transparencia, que en términos generales ha dado continuidad la alcaldesa interina, Angelina Muñoz, quien como se sabe suple a “El Maloro” en su ruta por ocupar un escaño senatorial.
En Cajeme, por más maledicencias vertidas en contra de las sucesivas gestiones de Rogelio Díaz Brown y de Faustino Félix Chávez, sin duda que las cosas han mejorado a pesar de las difíciles condiciones que le tocó lidiar a “El Roger” víctima de las revanchas del gobierno de Padrés, por su decidida participación junto a los ciudadanos de ese municipio en la lucha por la defensa del agua.

Faustino Félix Chávez
Esa irreductible posición por supuesto le costó al ayuntamiento y a los ciudadanos, aunque haya quienes sin ver más allá de sus fosas nasales se olviden del origen de todo ese trabuco con el que se enfrentó Félix Chávez y que a casi tres años de distancia ha podido no sólo recomponer el cuadro, sino propiciar mejores condiciones para la inversión, generación de empleo, ampliar la conectividad con el resto del estado y del país y avanzar sustancialmente en la mejora de la infraestructura comunitaria y en la eficiencia en los servicios que presta el ayuntamiento.
Por supuesto, en el caso de las gestiones municipales aludidas, tales logros no habrían sido posibles sin el apoyo de la gobernadora Pavlovich, factor de igual importancia en las administraciones de otros ayuntamientos encabezados por partidos distintos al PRI, ya que como se sabe, la gober no hace distingos cuando se trata de llevar beneficios a la gente.
Este domingo la voluntad popular emitirá su calificación y por lo que se ve en lo relativo a la elección municipal en Hermosillo y Cajeme, los ciudadanos ya fueron curados de espantos y perfila para las alcaldías a Ernesto de Lucas y a Emeterio Ochoa, respectivamente, en tanto en mancuerna con Sylvana Beltrones, “El Maloro” será representante de los Sonorenses en el Senado de la República, en el marco de una combinación donde además de sus trayectorias políticas y antecedentes en el servicio público, está la consistencia de sus campañas y propuestas para conquistar la estimación de la gente.
En ese último aspecto, las campañas y propuestas, así como antecedentes, qué pero les ponen por ejemplo a Kitty Gutiérrez, que llevando como principal recomendación su gestión como diputada de la actual legislatura local, de acuerdo a mediciones del Comité Ciudadano del Desempeño Legislativo, está entre las mejor calificadas y no por nada está en calidad de favorita para mantenerse en la representación popular sonorense.

Ernesto de Lucas
Candidata por el XI Distrito local, la Kitty es parte de esa camada priista que ha hecho una vocación el servir a la gente y que junto a Flor Ayala, Iris Sánchez, David Palafox, Epifanio Salido, Ulises Cristópulos, Vicente Solís y Oscar Cano, estarán en las papeletas este domingo, cuando en la mayoría de los casos son perfilados para sacar el mayor número de votos, e igual ocurre en Cajeme con Anabel Acosta, Omar Guillén, Brenda Jaime y Denisse Navarro.
Por cierto, si bien en los personajes citados sus trayectorias y hechuras en favor de la gente los perfila a obtener buenos resultados en la elección, es a la inversa con otros, que con las mismas pretensiones de permanencia política los condena al rechazo popular, que ojalá ocurra así en el caso de Puerto Peñasco, donde lo peor que pudiera ocurrir para la gente de ese destino turístico, es que el mafioso, tracalero y corrupto Kiko Munro se salga con la suya.
Lo bueno es que todo indica que no será así porque los rocaportenses ya aprendieron la lección y optarán por un gobierno municipal decente encabezado por Francisco García Vega y además que los habitantes del II Distrito volverán a tener representación en el Congreso del Estado con la profe Rafaela Félix Bernal, luego del abandono de la tránsfuga del PAN, Célida López, quien ahora anda de candidata a la alcaldía de Hermosillo, en grosero insulto a la inteligencia de los capitalinos.

Anabel Acosta
Todo lo acá asentado debería ser parte de las reflexiones que los ciudadanos debemos hacernos para no incurrir en equivocaciones al emitir el voto, aunque a decir verdad, los contrastes entre las mejores y las peores opciones son tan marcadas, que no vemos dificultades para definir en forma correcta.
Y las cosas se podrían poner mucho mejores derivado del trabajo de la Fiscalía Especializada en Materia de Delito Electorales, porque conforme pasan los días más esqueletos salen de los armarios de Juan Bautista Valencia, del primer círculo de Guillermo Padrés y gerente del PAN durante su administración, y quien en estos días pasa los días asilado en algún caluroso rincón del Cereso 1 de Hermosillo, donde junto a otros tres compañeros de partido, enfrenta imputaciones de recibir ilegalmente poco más de cinco millones de pesos del gobierno estatal.

Francisco García Vega
Pues todo indica que esa transa sólo es la punta del iceberg y es cosa menor frente al trafique de más de 400 millones de pesos a través de un par de asociaciones civiles encabezadas por el de Granados, Adrián Espinoza y Luis Enrique Terrazas y utilizadas de fachadas para hacerse de mulas, bajo la estricta supervisión de Roberto Romero y del propio Padrés.
Adrián Espinoza está en calidad de desaparecido, aunque se habla de un reencuentro con el activismo político a través de MORENA apoyando financieramente a la mentada Célida, su otrora adversaria en la interna del PAN donde resultó electo David Galván como dirigente estatal.

Adrián Espinoza
Miren, con dinero las penas son menos, porque por rumbo de los indiciados la lana es lo que sobra y por eso como abogado de la defensa está quien también es abogado de Padrés, Raúl Germán Rodríguez, del staff del despacho de Carlos Navarro Sugich y quien hace poco más de un año fue acusado de recurrir a acciones intimidatorias para impedir la declaración de un testigo en el proceso que se le sigue al rata mayor asilado en el Reclusorio Oriente.

