Mamá, perdóname por seguir alimentando recuerdos de dolor, por no distinguir que eres un ser espiritual que cariñosamente estuvo dispuesto a lle
Mamá, perdóname por seguir alimentando recuerdos de dolor, por no distinguir que eres un ser espiritual que cariñosamente estuvo dispuesto a llevarme en tu vientre para que tuviera oportunidades en la Tierra de crecimiento.
Perdóname por hablar contigo de todos modos, por no saber que tenemos un pacto de Amor, por herir tus sentimientos en base a mis propias percepciones. Perdóname por cada minuto que pensé que todo esto se trataba de ti y no de mí. Perdóname por nuestra historia juntos, por querer cambiarla, por no poder superar nuestras diferencias.
Perdóname por no darme cuenta de tu significado en mi vida, quién eras realmente, porque a través de ti solo vi a mi hijo herido en mí, porque solo sentí dolor dentro de mí. Perdóname por querer irme de tu vida, perdóname por irme, perdóname por no querer volver a ti, perdóname por no honrarte y no amarte lo suficiente.
Me perdono por mi capacidad latente de herir, de resentir, de hacer daño, de odiar, nada de esto fue creado conscientemente, una fuerza interior, una razón, un recuerdo, una queja, el deseo y mi necesidad de huir del dolor me impulsaron a mí.
Busco perdonarme por completo y lo hago ahora. Sin duda te agradezco que en un acto de amor consciente o inconsciente me trajeras a la vida, a este mundo y por haber hecho lo mejor para que yo pudiera conocerlo y vivir de la mejor manera.
Te agradezco por vivir juntos, por las experiencias juntos, por el dolor, por las lágrimas, por las risas, por las ausencias, por las heridas abiertas, por las palabras lindas. Te agradezco porque existes en algún lugar de mi ser y por escucharme ahora. Dios os bendiga.
Lamento los recuerdos de dolor que comparto contigo, te pido perdón por unir mi camino al tuyo para sanar.
Te agradezco porque estás aquí para mí y te amo por ser quién eres. Yo también te amo porque estás en mis recuerdos.
Créditos a quien corresponda.
