Bendícete. Cuando tú te bendices no hay obscuridad que perdure, tienes el poder de crear y transmutar las energías, recuerda que eres un alquimista: b
Bendícete. Cuando tú te bendices no hay obscuridad que perdure, tienes el poder de crear y transmutar las energías, recuerda que eres un alquimista: bendigo ahora mi vida, mi familia, mi casa, mis finanzas y nuestra felicidad.
Cancela. Toda la energía negativa que ha llegado a tu vida a través de decretos o pensamientos mal intencionados, cargados de bajas vibraciones y declara: yo cancelo, disuelvo y transmuto cualquier energía negativa que se acerque o intente acercarse a mi vida. rompo todo lazo espiritual energético con las personas que me han deseado mal, y lo entrego con luz a la justicia divina del universo.
Agradece. Por la transformación divina en tu vida y por la asistencia del universo para manifestar tus decretos aquí y ahora. declara: gracias divinidad por todo el amor, la protección y la luz que me rodean a mí, a mi familia, a nuestros hogares e intereses. me bendigo y te bendigo. gracias infinitas por todo.
Puedes hacer esta limpieza y transmutación energética acompañándote de un incienso de canela, mirra, romero, sándalo, loto o jazmín.
Para mantenerte en armonía y plenitud constante, medita y fortalécete espiritualmente, la meditación equilibra nuestros chackras energéticos y activa nuestra aura para que actúe en su máxima expresión de luz como campo de protección espiritual.
Gracias, gracias, gracias.
Bendice.
Cuando bendices a alguien o algo creas un escudo de luz de protección divina sobre la persona, animal o planta, le deseas que todo lo que llegue a su vida sea para su mayor bien. de allí la importancia siempre de bendecir con amor.
