Gennady Golovkin se quedó sin la millonada que hubiera ganado, de haber peleado este sábado contra Saúl Álvarez, pero al menos no tuvo ni siquiera que
Gennady Golovkin se quedó sin la millonada que hubiera ganado, de haber peleado este sábado contra Saúl Álvarez, pero al menos no tuvo ni siquiera que despeinarse para mantener sus títulos de peso medio.
Al kazajo le tomó apenas poco más de un asalto deshacerse de su rival en turno, el estadunidense Vanes Martirosyan, quien no aguantó su poder de puños y acabó derribado en los inicios del segundo asalto en el StubHub Center, en California.
Luego de un primer asalto en el que Martirosyan (36-4-1) golpeó al final del asalto a GGG, el campeón salió decidido a no recibir más daño en el segundo.
Golovkin (37-0-1, 34 KO’s) no pudo demostrar otra cosa que no fuera el poder de sus golpes contra un rival propicio para la ocasión, y en el segundo asalto se le fue encima a un contendiente que no supo contener la furia del europeo que se fue con una fácil victoria.